martes, 4 de enero de 2011

¿Desungular? NO!!

El otro día conocí a una persona que tenía a su gato desungulado. Cuando le dije que esa práctica era una bestialidad me miró con sorpresa, ignoraba totalmente el salvajismo que conlleva. Sé que muchísima gente que desungula a sus gatos no lo hace a mala fe, lo hacen por desconocimiento, lo hacen porque no saben lo cruel que es y que además, con unas sencillas pautas puedes tener a tu gato con unas uñitas arregladas y tus muebles a salvo. ¿Cómo? Sencillo, y voy a explicarlo en esta entrada.
Antes de comenzar, me gustaría explicar qué es la desungulación.

"¿qué es desungular? es la eliminación de las uñas del gato mediante una operación quirúrgica. Esta operación se llama Desungulación. No obstante, el término desungular es demasiado suave para lo que realmente es la operación y las consecuencias que ésta tiene en el felino. La operación es complicada ya que consiste en amputar la última falange del dedo del gato, base del tendón retráctil y lugar del nacimiento de la uña. Con ella las uñas retractiles que habría utilizado a lo largo de su vida para rascarse, jugar, caminar y defenderse desaparecen para siempre." Fuente: Mundogatos.

Para que os hagáis una idea, es como si nosotros nos cortáramos la última falange de nuestros dedos, la de las uñas. Es, dicho claramente, una AMPUTACIÓN.


Si a nosotros nos cortaran esa parte de los dedos, ¿acaso no tendría consecuencias psicológicas y físicas para nosotros? Pues en los gatos pasa lo mismo:

"Pierden la capacidad para rascarse en muchas zonas de su cuerpo.
- Pierden flexibilidad y tonicidad que mantenían gracias al estiramiento durante el rascado.
- Actividades como escalar, mantenerse en superficies estrechas, o incluso salir de algún apuro se vuelven difíciles o imposibles.
- Sus juegos se ven reducidos. No puede agarrar los muñecos, lanzarlos, atraparlos...
- Dificulta la tarea de excavar y cubrir su desechos.
- En caso de peligro la capacidad de defensa del gato disminuye considerablemente.
- Situación psicológica: la incapacidad para hacer todas las tareas anteriormente enumeradas le crea una sensación de ansiedad y angustia, lo que le sume en una situación depresiva, volviéndose un animal retraído, llegando a aislarse voluntariamente. Además el gato utiliza el rascado como descarga de estrés. Cuando el gato tiene una acumulación de energía utiliza el rascado como una liberación ante ese acumulo, y le permite relajarse y volver a la rutina de nuevo. Privarle de ello contribuye a desequilibrios emocionales".
Fuente: Gatofeliz

Sé de casos en los que el animal deja de hacer sus necesidades en su cajón de arena por el mero hecho de problemas psicológicos y por el dolor que le produce enterrar sus caquitas; y otros que se vuelven ariscos. Sé también que la propia operación en algunos casos se complica y el postoperatorio no es fácil... vamos, volviendo a lo mismo, estamos hablando de una crueldad.

En algunas comunidades autónomas esta práctica está prohibida, pero desgraciadamente son las menos. Muchas veces queda a juicio del veterinario que, o bien desaconseja la práctica, o bien la realiza bajo el lema del "tú pagas, yo trabajo". Así pues, nos tenemos que concienciar todos de que esta práctica puede tener consecuencias para tu mascota bastante graves.

Ahora bien, ¿cómo salvar nuestros muebles?

La clave está en una educación correcta del gato y en un recortado periódico de las uñas.
En mi caso, al ser Jan Jan de un criadero responsable, vino aprendido a afilarse las uñas en su rascador. Sin embargo, eso no quita que un gato que no esté acostumbrado no se le pueda enseñar a afilarse las uñas en uno de ellos.

Lo primero es conseguir un rascador. Hay de muchas formas, colores y tamaños, lo podéis comprar, o incluso por internet podréis encontrar "recetas" para hacer uno casero. El que Jan Jan tiene, no es que sea excesivamente grande, pero es lo suficiente como para que un gato de 7 kilos se pueda afilar las uñas sin volcarlo, ya me entendéis ;) Para hacer que les guste, sólo tenéis que hacer ruidito como si tú mismo te afilaras las uñas, eso les estimula a hacerlo ellos también. Podéis pulverizar el rascador con sprays de "catnip" (en tiendas de animales), una hierba que atrae a los gatos y hará que el rascador les llame la atención. Y por supuesto tened paciencia, es el secreto para que al gato le termine gustando algo ;)





Si ya tiene la manía de rascar en los muebles, tened a mano un spray pulverizador rellenado de agua. Cuando el gato esté rascando en el sofá, pulverizadle sin que os vea (es muy importante que no os vea porque si no os asociará con el agua). Mientras adiestráis al gato a usar su rascador, también es conveniente colocar cinta de carrocero en las zonas donde se afila las uñas, ya que así les deja de gustar ese sitio y buscará otro... el rascador, por ejemplo ;) Pero ante todo, lo que hay que tener es muchísima paciencia, sobre todo con gatos que ya no son unos bebés.

Otra cosa que es conveniente hacer es recortarle las uñas periódicamente. Esto evitará que nuestro gato se quede enganchado en algún sitio al sacar las uñas, ¿quién no ha tenido algún enganchón en la cortina porque el gato ha visto una mosca posada en una de ellas?

Recortarle las uñas es muy sencillo; pero se requieren dos cosas: que el dueño aprenda, y que el gato se acostumbre. Yo tuve la suerte de tener muy buenas profesoras, tanto su criadora, como Kian, me dieron buenas clases... y aparte, la primera vez que llevé a Jan al veterinario, allí también me dieron una buena lección de cortado de uñas. Vamos, que entre una cosa y otra, ahora soy toda una experta (aunque está mal que yo lo diga... mwajajaja)

¿Cómo cortar uñas?
Necesitas unas tijeras como estas:


Cortar es muy fácil, pero hay que tener un poco de cuidado para no hacer daño al gato. Dentro de la uña, hay una zona rosita que NO HAY QUE CORTAR.

(Fuente foto: mundodelkitty)

Llevando cuidado con eso, lo demás es coser y cantar. Si no te atreves, corta al principio sólo la puntita, y ya verás cómo poco a poco te vas acostumbrando… y el gato también. Si no se deja, prueba hacerlo cuando esté medio dormido, o pedir ayuda a alguien para que te sostenga al gato, y cuando acabes dale algún premio, para que asocie el cortado de uñas con la recompensa. A mí también me funciona rascarle la pancita entre uña y uña, así se relaja. Y bueno, aquí os dejo un vídeo para que veáis que, con paciencia, el gato aprende a dejarse hacer ;)



Espero que esta entrada os haya resultado útil, consideradla como mi regalo de Reyes ;)

10 comentarios:

  1. Hoy día, al menos en nuestra comunidad, desunglar está prohibido, y ningún vete lo hará,
    hay unas tijeritas aún mejor que las que muestras, que detectan los vasos sanguíneos, y al suceder eso se enciende una lucecita roja, queteindica, ahí no cortes !!
    de todas formas, también hay vetes que dicen..
    lo que se corta,
    siempre crece más !
    si el gato se afila bien las uñas en su rascador, en muchos casos no es necesario cortárselas, pues ellos mismos se las afilan correctamente, eso si, si aprenden ha hacer una buena y asidua utilización del rascador,
    besitos, estás muy guapo !

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  2. Hola!Yo pensaba que en toda España estaba prohibido desunglar gatos! Es una brutalidad! Lupe tiene su rascador peor también usa el sillón, y otra cosas, le damos con el pulverizador de agua peor la verdad es que lo sigue haciendo por instinto..no es algo que nos preocupe demasiado la verdad, ya sabíamos que los gatos hacían esas cosas y también es su casa no? :)
    Lo que sí nos gustaría es lo de poder cortarle las uñas de vez en cuando si fuera necesario, pero no hay manera! no se deja coger y a penas se deja tocar así que..ya ves..también hace poco que la adoptamos así que con el tiempo puede,si sabe que nosotros no la maltrataremos sí se deje hacer más cosas.

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  3. Pruno, curioso lo de las tijeritas, no las he visto nunca! de todas formas con esas me apaño bien, le recorto la puntita y ya está ;)

    Gris, es cuestión de mucha paciencia. Los gatos son cabezones, sólo hay que ser más cabezones que ellos todavía, jejeje ;)

    Y sí, desgraciadamente en algunas comunidades no está prohibido, sin ir más lejos, aquí en Alicante.

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  4. Importante entrada. Aquí en mi ciudad no está prohibido, es así de patético, pero tampoco conozco a gente que lo haga.
    Es muy importante también, para las personas que tengan problemas con este tema, no ceder cuando se quieren escapar del cortado... es decir, cuando le pongas encima y ya se quiera ir, es bueno sujetarle, hacerle mimitos y enseñarle que se irá cuando tú quieras... aunque ni siquiera puedas cortar para que vea quien controla la situación y con paciencia cortar sólo una uña cada día, por ejemplo y premio inmediato... ¡¡aunque sea un juego!!
    Con los mios no tenemos muchos problemas, aunque no les gusta se dejan porque así les hemos enseñado, las uñitas de Petra y Bec se ven muy bien para evitar llegar a la carne ¡¡pero está muy curioso eso de las tijeritas avisadoras!!
    Feliz año!!

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  5. Estupenda explicació.
    Carol, como se nota que Petra y Bec son dóciles , intenta cortarle las uñas a un gato con, digamos más carácter o con un carácter más salvaje...
    Yo ya estoy vencida y resignada, la casa como dice Lupe es de los cuatro.
    Conozco algún caso de gato sin uñas aquí en Gijón.
    Jan Jan, veo que eres otro precioso gatito de peluche de los que yo digo que van pilas.

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  6. Jan Jan el pobre se deja hacer lo que quieras, es un verdadero amor, he tenido mucha suerte :)

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  7. Yo jamás hubiera desungulado a Luna aun desconociendo de qué se trataba, pero cuando supe lo que era realmente... desde luego ya ni se me pasa por la cabeza.

    Quiero decir que a mí nunca se me pasó, pero nada más tener a Luna con apenas 2 días de vida, la vecina que nos la entregó nos dijo que cuando creciera se le podían quitar las uñas, y yo entonces no sabía bien de qué se trataba, pero ahora que lo sé desde hace años, estoy totalmente en contra de esta práctica.

    Con paciencia se puede enseñar a nuestro gato a rascar en los rascadores y a cortarles las uñas. No es tan complicado como parece.

    Besotes
    Sara

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  8. Joer... una cosa es castrar y otra muy distinta amputar todo aquello que nos pueda fastidiar el gato (que no me gusta que olfatee, le quito las narices. Aún menos que maulle, pues las cuerdas vocales... Joer, darselo a un chino, lo mismo lo aprovecha más :S).

    Precisamente el gatuno de mi tiilla le tiene por el camino de la amargura por las uñas, ya que no sólo se afila en el sofa (cosa que le da igual) sino en su pierna :S A ver si se va enterando lo del rascador y saca paciencia que ninguna tiene XDDDDDD

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  9. Lax, es que cuando se acostumbran a algo es difícil quitárselo de la cabeza... U_u
    a ver si algún día se animan, porque luego lo agradecen los sillones xD

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  10. Me ha gustado mucho tu articulo!! sobretodo ver la foto de la mano, está genial!!!
    un saludo,
    Tania

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